Club oficial de Juan Andres Salfate
  Revista Dato
 

Entrevista de la revista dato a Juan Andres Salfate:


salfate1.jpg

“Ahora me caigo bien”

El mediático publicista reconoce que pasó por una adolescencia engreída. Hoy, reconciliado consigo mismo, disfruta de su propia compañía y de lo que transmite.

 

Las conversaciones de Salfate están llenas de citas, su vocabulario es amplio y tiene un ritmo muy rápido. Hiperkinético y con nuevos proyectos siempre pululando en su mente, el Salfa, se excusa y contesta el teléfono. “Sorry, es pega” dice levantando los hombros. Así es, durante la entrevista recibió más de una oferta de trabajo. En ese contexto, bien podría denominarse “el rey del pituto”. Lo quieren de allá, lo quieren de acá… ¿Cuál es la razón para que este pequeño y potente comunicador, por esencia, lo reclamen de todos lados?

 

Quizás, sea por la expertisse de su área, la forma en que cuenta y envuelve cada hecho o su singularidad. Pero, lo cierto es que Juan Andrés Salfate es una de las pocas personas que se ha dado el gusto de estar en varios medios de comunicación simultáneamente y en programas tan diversos como “Sinvergüenza” de Chilevisión, comentando películas en Radio Zero o en el ya mítico “Así Somos” de REDTV, donde habla de todo. 

 

¿Cómo evalúas este tiempo en “Así Somos”?

La verdad, creo que es el mejor programa que puede existir, de frentón. Ellos me convencieron de volver a trabajar en televisión, yo no estaba haciendo tele, me llamaron para venir al programa de invitado… y a último momento me arrepentí de ir, pero fueron a buscarme a la  casa… de eso ya más de dos años.

 

Salfate tienes una liga de seguidores, en su mayoría jóvenes, y otros no tanto, donde vayas ellos están, ¿no tienes problemas con tu ego?

No, lo del ego lo tengo resuelto hace tiempo. No trabajo el ego, es malo para la salud mental y posteriormente para el cuerpo. Te hace dependiente de muchas cosas, mi motivación principal está en el interés de compartir. Las cosas que hago: las clases, los programas, me estimula poder regalar conocimiento. Mi crecimiento personal lo busco por meditación y lecturas muy específicas. Me siento satisfecho con que la gente reciba lo que les entrego y que hagan con ello lo que mejor les parezca. Tengo una ansiedad y necesidad de compartir, soy “antikiko”, no muestro y guardo, sino que muestro y comparto. No puedo contener, ni guardar todo, explotaría en algún momento.

 

¿Cuál es para ti la mejor profesión del mundo?

Sin titubeos te digo que la de profesor. Pero, la calidad del producto depende de las dos partes, de quien habla y de quien escucha. Creo que es muy satisfactorio ser maestro, y así con todas sus letras, aunque, soy súper crítico de los profes en general…no todos están preparados como debieran y no todos trabajan impulsados bajo una vocación real y por lo mismo, no logran convocar el interés necesario de quienes podrían tener más aptitudes. Pero, cuando es un profesional que se toma en serio su cuento, eso se agradece de sobremanera.

 

¿Y tú haces clases?

Sí, generalmente son ramos de apreciación del arte y cine. He hecho clases en universidades (Universidad de Chile, Diego Portales, Finis Terrae) y ahora me invitaron a participar de un proyecto de Balmaceda 1215, donde van tanto estudiantes universitarios como escolares. Pero, lo que está entrando fuerte ahora es la curación por medio de películas, que fue algo que partió en broma, pero se ha transformado en algo muy serio, y me están pidiendo que les haga talleres de cineterapia.

 

¿Y cómo es eso de la cineterapia?

Es algo “muy Jodorowsky”, pero ocurre que como tengo un disco duro gigante en la cabeza de películas, hago conexión rápida con los temas, bajo ciertas dolencias emocionales de las personas yo le expongo una película que plantea su problema y otra que puede ayudar a solucionarlo. Hay tantas historias escritas en películas que hay un caso para todo y todos.

 

¿Y ha dado resultados?

Sí y ha sido increíble, muchas personas se han reparado. Pasa que cuando ves una película, muchas veces te sientes identificado con personajes, escenas o situaciones, pero lo dejas hasta ahí… Acá se trata de profundizar y analizar el problema con una película que no necesariamente tiene que ser buena, sino que debe poner en imagen lo que te está pasando. La idea es usar el cine como herramienta de codificación y simplificación de problemas cotidianos.

 

¿A qué atribuyes tu arrastre con los jóvenes?

Ahhh, puede ser que no sé que edad tengo. ¿Parece que tengo 41? No me siento ni más viejo ni más joven que eso. Soy una mente y alma que crece en información y en experiencia… Pero, no estoy obligado y nunca me he sentido obligado a nada ni siquiera a vestirme de determinada manera. Yo con esta ropa que visto no mando ningún mensaje, lo que pasa es que nunca he encontrado algo más cómodo que un jeans y una polera. Con los únicos que puedo tener problemas son aquellos que me quieran enfrascar en algo, con los que dicen “este tipo es muy algo”… y ven una parte mía: no sé poh o dicen que soy muy garabatero, que no me tomo nada en serio. Pero, hay otros que dicen lo mismo pero ven el potencial “ah, él no se toma nada en serio, pero qué bueno, puede hablar de cualquier cosa”. No soy grave. 

 

¿Y continúas realizando jornadas de películas al estilo de “Maldita Sea”?

Sí, seguimos haciendo maratones con mi amigo Pera Cuadra. Se muestran como 12 películas desde la tarde hasta pasada la una de la mañana y en cierto momento vamos y hacemos una charla de un tema específico. Luego, repetimos el ejercicio de “Maldita Sea”, adelantamos cuando está fome o retrocedemos cuando estuvo buena alguna escena, con control remoto en mano interactuamos con la gente. Nos están pidiendo que salgamos a regiones, así es que estamos viendo la opción de alternar las maratones este año, en Santiago (Cine Arte Alameda) y provincia.

 

 

“Nunca he buscado trabajo”

Juan Andrés fue hijo único y reconoce que tal vez por ello le gusta la soledad. Cecilia su esposa, es quien, ciertamente, mejor lo conoce. La primera vez que la vio ella tenía 10 años y él 11. Tienen tres hijos: Lukas (16) Eduardo (8) Francisco (6).

 

¿Tu esposa comparte contigo tus gustos, tus aficiones?

No necesariamente, es bien tradicional ella, es mi cable a tierra. Le gustan las cosas más de verdad, la naturaleza, el contacto con el resto de las personas, es muy sociable. Éramos los mejores amigos en el colegio y terminamos de pololos. Nos conocemos desde quinto básico.

 

Crecieron juntos, literalmente… ¿Y qué tal la relación con tus hijos?

Tengo una excelente relación con ellos, los más chicos, me ven como niño; yo juego, me tiro al suelo. ¿Sabes? Siento que lo he hecho bien, porque mi hijo mayor que ya es adolescente y está en una edad, ya sabidamente, más complicada, no se ha rebelado y me manifiesta sentimientos de profundo respeto y si pelea, pelea con la mamá no conmigo (ríe).

 

Haces realmente lo que te gusta, no muchas personas se pueden jactar de ello…

Sí por supuesto. Hago mía la célebre frase del cineasta François Truffaut: “Soy el hombre más feliz de la tierra, porque hago lo que me gusta y me pagan por ello”. Curiosamente,  nunca he buscado trabajo en mi vida, no sabría cómo hacerlo…

 

Nombra tres películas potentes para ti

“Hierro 3”,  “Blade Runner”, “Apocalypse Now”.

 

¿Sólo de acción?

No, ninguna. La primera es un drama minimalista, la segunda es ciencia ficción y la

última es un drama metafísico.

 

¡Ups!... ¿Te sentiste incomprendido en algún momento?

Sí, mucho, sobre todo en mi etapa adolescente. Estaba muy consciente de lo que sabía y lo que sentía y fui muy engreído, estaba en la parada contraria a la que estoy ahora. Reconozco que fui muy arrogante en esa etapa con mis papás, amigos, etc. Mirándolo ahora veo que era una frustración mal canalizada, ya que si mis amigos no tenían mis mismos intereses o inquietudes los rebajaba… propio de la inmadurez adolescente.

 

¿Y qué hizo click?

La madurez, el proceso decantó solo finalmente. Además viví una regresión que me hizo ver que estaba mal, que no podía seguir así. Fue una epifanía y alquimia interna maravillosa. Ahora me caigo bien a mi mismo, incluso me gusta mi compañía y no necesito de mucha gente para estar bien. Hay muchas personas que meten mucho ruido a su alrededor, cuando están en pareja dicen: “estamos solos, estamos sin niños… ¿qué hacemos? Ya, llamemos a amigos…”, a mucha gente no le gusta escucharse, no les gusta estar solos, a mí por suerte no me pasa eso.

 

¿Cómo es tu día ideal?

Con muchas horas de sueño, de preferencia estando solo, un buen sándwich, alguna bebida, y con tiempo para leer y ver un montón de películas que tengo pendientes.

 

Mis Datos

Para salir a comer: “Kintaro” Restaurante japonés (Monjitas 460)

Deporte: Practico Aikido en Academia Hakusan (El Aguilucho 3308, Providencia
Tel: 9-824 2298)

Música: “Turandot” de Puccini, Plácido Domingo.

Página de descarga: www.newwebstar.com (películas, música, programas y series de televisión).
 
  Hoy habia 4 visitantes (9 clics a subpáginas) ¡Aqui en esta página!  
 
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis